Noviembre llega a Madrid cargado de exposiciones que invitan a explorar el arte, la fotografía, la ciencia y el diseño desde múltiples perspectivas. Pintura, cine, fotografía, moda y naturaleza se combinan para ofrecer recorridos que sorprenden, inspiran y hacen pensar. Desde los colores y las emociones del expresionismo hasta la revolución de la inteligencia artificial, pasando por retratos, esculturas y objetos históricos, la ciudad se convierte este mes en un verdadero escaparate de creatividad y curiosidad.

Estas son algunas de las muestras que no te puedes perder en noviembre en Madrid:

1. Expresionismo. Un arte de cine.

El expresionismo fue mucho más que un movimiento artístico: fue una revolución cultural que buscaba unir arte y vida en un mismo pulso. Con colores intensos, perspectivas distorsionadas y emociones al límite, los artistas expresionistas trataron de revelar lo que se oculta tras la apariencia del mundo.
Por primera vez en España, esta exposición propone un viaje al corazón de aquel universo estético y emocional, mostrando el diálogo inédito entre el expresionismo y el cine durante las primeras décadas del siglo XX.

A través de 152 obras y fragmentos cinematográficos, podrás descubrir cómo el arte y el séptimo arte se fusionaron para crear imágenes inquietantes y visionarias.
Desde los rostros desgarrados de Käthe Kollwitz hasta los paisajes urbanos de Otto Dix, pasando por películas icónicas como ‘El gabinete del Dr. Caligari’ (1920) o ‘Metrópolis’ (1927), la muestra traza un recorrido fascinante que aún resuena en la obra de creadores contemporáneos como Tim Burton, Guillermo del Toro o David Lynch.

2. Edward Weston. La materia de las formas.

Maestro de la fotografía moderna, Edward Weston dedicó su vida a explorar la pureza de las formas y la fuerza de la luz, convirtiendo lo cotidiano en esculturas visuales de sorprendente belleza. La exposición Edward Weston. La materia de las formas, comisariada por Sergio Mah, reúne cerca de doscientas fotografías que recorren todas las etapas de su carrera, desde retratos iniciales hasta sus célebres naturalezas muertas, desnudos y paisajes.

Su obra, estrechamente ligada al paisaje y la historia cultural de Norteamérica, destaca por su simplicidad, precisión técnica y originalidad. Con cámaras de gran formato, Weston consolidó un lenguaje fotográfico moderno que contribuyó a otorgar a la fotografía un estatuto artístico propio, ofreciendo una mirada única sobre la naturaleza y la forma.

3. Robert Rauschenberg: el uso de las imágenes.

Inventor, experimentador y provocador, Robert Rauschenberg transformó la manera de entender la creación artística, borrando las fronteras entre pintura, escultura y fotografía. La exposición Robert Rauschenberg: el uso de las imágenes, organizada por la Fundación Juan March, revisita su legado desde una perspectiva inédita: su relación constante con la imagen como material de pensamiento y creación.

Desde las fotografías tomadas en el Black Mountain College en los años cincuenta hasta sus célebres Combines y Silkscreen paintings, la muestra recorre cómo Rauschenberg incorporó imágenes —recortadas, impresas o propias— a su obra, desafiando jerarquías visuales y transformando lo cotidiano en un lienzo experimental.

4. Nike. Diseño en movimiento.

El diseño, la tecnología y la cultura urbana se dan la mano en Nike. Diseño en movimiento, procedente del Vitra Design Museum y organizada por La Fábrica, que llega a TeamLabs/ el 12 de noviembre. Comisariada por Glenn Adamson, la muestra recorre más de seis décadas de innovación de la marca, desde sus primeros prototipos en los años sesenta hasta los avances actuales en sostenibilidad y materiales.

A través de objetos, bocetos, prototipos y piezas de archivo, la exposición muestra cómo el diseño ha definido la identidad de Nike y su influencia en la cultura contemporánea. Más que una retrospectiva estética, es una inmersión en la evolución del logotipo, las zapatillas icónicas y la estética del cuerpo en movimiento, revelando cómo deporte, tecnología y creatividad transforman nuestra manera de vestir y de moverse.

5. Retratadas. Estudios de Mujeres.

El retrato femenino del siglo XIX cobra nueva vida en Retratadas. Estudios de Mujeres, que revisa la relación de las mujeres con la fotografía desde sus orígenes. A través de daguerrotipos, álbumes y retratos de estudio, la muestra explora cómo las protagonistas no solo posaron ante la cámara, sino que hicieron del acto de ser retratadas una forma de expresión y libertad frente a los rígidos códigos sociales de la época.

El recorrido se centra en el “cuarto-tocador”, un espacio íntimo que muchos estudios ofrecían a sus clientas y que se convierte aquí en metáfora de una habitación propia. Allí, las mujeres experimentaban con su imagen y negociaban su identidad, participando activamente en su representación. Retratadas reivindica su papel como creadoras, coleccionistas y espectadoras, mostrando su contribución decisiva al desarrollo de la fotografía.

6. Picasso y Klee en la colección de Heinz Berggruen.

El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza presenta una exposición que pone en diálogo a dos gigantes de la modernidad: Pablo Picasso y Paul Klee. Picasso y Klee en la colección de Heinz Berggruen reúne cincuenta obras maestras que muestran afinidades y contrastes entre ambos artistas, comisariada por Paloma Alarcó y Gabriel Montua.

Lejos de una comparación superficial, la muestra revela cómo dos personalidades opuestas —Picasso, terrenal y excesivo; Klee, introspectivo y poético— compartieron un impulso creativo similar: transformar la realidad a través de un lenguaje plástico libre y radical. Dividida en cuatro secciones —Retratos y máscaras, Lugares, Cosas, Arlequines y desnudos—, la exposición invita a descubrir un diálogo visual que celebra la imaginación y la libertad artística.

7. Chez Matisse. El legado de una nueva pintura.

El Centro Pompidou y la Fundación “la Caixa” presentan Chez Matisse, que reúne 46 obras de Henri Matisse junto a casi medio centenar de piezas de artistas posteriores que encontraron en él una fuente de inspiración. El recorrido, dividido en ocho ámbitos, traza un diálogo entre el maestro fauvista y creadores de distintas épocas, desde los fauves alemanes y neoprimitivistas rusos hasta la pintura estadounidense de los años 40.

Más que una retrospectiva, Chez Matisse es una conversación intergeneracional sobre el poder del color, la sensualidad de la línea y la pintura entendida como placer visual y libertad creativa. Su obra sigue invitando al espectador a habitar un espacio «fuera de lugar», donde el arte se convierte en gozo y emancipación.

8. Antonio Raphael Mengs (1728-1779).

El Museo Nacional del Prado dedica una gran retrospectiva a Antonio Raphael Mengs, figura clave del neoclasicismo europeo y pintor de cámara de Carlos III. Con el patrocinio de la Fundación BBVA, la muestra reúne cerca de 150 obras —óleos, acuarelas, dibujos, pasteles y el fresco Júpiter y Ganimedes— procedentes del museo, Patrimonio Nacional y colecciones internacionales.

Comisariada por Andrés Úbeda y Javier Jordán de Urríes, la exposición ofrece una visión integral de su trayectoria y su papel como teórico del arte. Más que una muestra histórica, es una reflexión sobre la transición del barroco al neoclasicismo y sobre cómo Mengs convirtió la belleza en un lenguaje universal.

9. El sueño de la razón. Del Siglo de las Luces a la inteligencia artificial.

La Fundación Telefónica presenta El sueño de la razón, que recorre desde el Siglo XVIII hasta hoy cómo la humanidad ha representado y comprendido el mundo a través de imágenes. Con cerca de 300 obras —dibujos, grabados y fotografías—, la exposición incluye desde estudios científicos de flora y fauna hasta las Vedute di Roma de Piranesi y la Descripción de Egipto, reflejando la obsesión ilustrada por documentar la realidad con precisión.

El recorrido conecta este legado con nuestro presente, marcado por la inteligencia artificial y nuevas tecnologías visuales, mediante instalaciones de artistas como Anna Ridler, Quayola o ScanLAB Projects. Comisariada por Valentín Vallhonrat e Ignacio Miguéliz, la muestra invita a reflexionar sobre cómo el arte y la tecnología transforman nuestra manera de observar, interpretar y comprender la realidad.

10. Ángel Cabrera, el naturalista infinito.

El Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN) rinde homenaje a Ángel Cabrera (1879-1960), uno de los mastozoólogos más destacados del siglo XX. La exposición recorre su legado científico y humano a través de fósiles, mamíferos, aves, ilustraciones, cuadernos de campo y publicaciones originales, destacando su labor como investigador, ilustrador y divulgador.

Cabrera describió más de 200 taxones y fue pionero en la defensa de la conservación de la biodiversidad. La muestra invita a los visitantes a descubrir cómo su curiosidad, imaginación y pasión por la naturaleza se tradujeron en un conocimiento profundo y en una forma de creatividad sin límites.